PABLO IGLESIAS: “La mentira es ideológicamente más eficaz que la verdad y es más rentable”

En realidad Iglesias se fue de la actividad partidaria porque el devastador resultado electoral que obtuvo en Madrid frente a Isabel Díaz Ayuso, lo convenció a su partido y a él mismo, según expresó públicamente, que “no aportaba en lo electoral” y era tiempo de retirarse a cuarteles de invierno.
Días atrás, el semanario de izquierda Voces transcribió esa charla del ex vicepresidente segundo español y ex líder de Podemos, en el Teatro El Galpón, quien brindó un taller de dos días sobre comunicación política para los cuadros militantes frentistas que trabajan en el tema en los distintos sectores del Frente Amplio.
La actividad se desarrolló entre el 16 y 17 de junio. Iglesias, retirado de la política partidaria, tras esa apabullante derrota electoral en Madrid, ofreció, a instancias del Frente Amplio, una charla llamada “Comunicación política y redes sociales en la era de la posverdad”. En el auditorio había varios dirigentes frenteamplistas, entre ellos José Mujica, Lucía Topolansky, Mario Bergara, Liliam Kechichián, Alejandro Sánchez y Juan Castillo.
Iglesias se refirió al poder de la “derecha mediática”, e indicó que “el terreno del combate fundamental” es el comunicacional. “Es mentira pensar que basta con tener un gobierno para cambiar las cosas; tener el gobierno no significa ni de lejos tener el poder, es tener un trocito muy modesto de poder”, expresó. En ese sentido, dijo que “tener conciencia de lo que significa es clave para encarar estratégicamente las batallas que vienen” para la izquierda en los distintos países.
El origen de este viaje del ex líder de Podemos a Uruguay, fue la invitación del presidente del Frente Amplio, Fernando Pereira, quien reaccionó de esa manera a los múltiples comentarios de dirigentes y militantes de la izquierda sobre la presunta mala comunicación de los gobiernos encabezados por Vázquez y Mujica, que habría sido la responsable de la derrota electoral de 2019.
Iglesias llegó para adoctrinar a la militancia del Frente Amplio en el uso de las redes sociales, la importancia de la comunicación política, y un modelo de enfrentar a lo que denominó “la derecha mediática”, pues “será el terreno del combate fundamental”, según expresó.
Al respecto Iglesias señaló que: “No puede ser que si los grandes medios de comunicación son los principales dispositivos ideológicos en una sociedad, se normalice que eso pueda tener una propiedad oligopólica o monopólica. Esto tiene que estar en los programas; la izquierda tiene que asumir que, si gobierna, los oligopolios mediáticos se tienen que acabar”.
“El contexto de batalla ideológica en nuestros días se está redefiniendo en tonos muy peligrosos”, dijo, “y tengo la sensación de que no siempre las izquierdas a nivel mundial han entendido o están entendiendo la importancia de contar con armas de combate ideológico adaptadas a nuestros tiempos”, agregó.
En el evento se plantearon consultas sobre “si en la batalla cultural por la creación de un relato, la izquierda va a hacer un movimiento”, y se afirmó en la misma pregunta que “da la sensación de que la derecha hace un mejor uso de la comunicación”.
Al respecto el español fue muy claro:“Creo que la política de por sí está definida por el conflicto. Esto no es malo. Hay quien dice que la política es el arte del consenso, pero eso es no entender la historia.”
En otro momento de su disertación, Iglesias ahondó en el tema de la creación del relato: “La mentira es ideológicamente más eficaz que la verdad, y además es más rentable. Cualquiera que trabaje en periodismo sabe que un titular sensacionalista genera muchos más clics y por lo tanto más ingresos en publicidad que un titular que se someta a unos principios deontológicos básicos. Esta es la nueva realidad.”
Sobre el final de su charla el ex político español expresó que “tiene que haber izquierda mediática también, que trabaje disputando cómo se informa, cómo se enfocan las noticias y señalando claramente a los adversarios políticos reales”.
Algunos analistas no encontraron muy afortunadas las palabras de Iglesias en ese aspecto, pues señalaron que no es el caso de Uruguay, en donde la izquierda es propietaria de varios importantes medios de comunicación en Montevideo, además de contar con periodistas, productores y editores afines, en prácticamente todos los canales de TV abierta y radios con la mayor audiencia.